El presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Pablo Milad, anunció este martes que comenzó formalmente el proceso de separación entre la ANFP y la Federación de Fútbol de Chile, con el acompañamiento de la Conmebol. El dirigente asistió a la Comisión de Constitución del Senado, donde sostuvo que esta medida apunta a “una institucionalidad deportiva más robusta, moderna, transparente, bajo un modelo y estructura aceptada por FIFA”.
Este anuncio marca un nuevo capítulo en una demanda de larga data dentro del fútbol chileno. Desde hace años, organismos como la Conmebol, e incluso actores clave del fútbol nacional, han solicitado que se delimiten claramente las funciones entre ambas instituciones. “Hemos manifestado hace bastante tiempo que es necesario que estén separadas”, dijo Gamadiel García, presidente del Sifup, recordando que la Federación debe ser el ente rector del desarrollo integral del fútbol chileno, sin conflictos de interés con la actividad profesional.
Una promesa que ya había sido anunciada
Esta no es la primera vez que Milad aborda este tema públicamente. En julio de 2021 ya había adelantado que la separación era “inminente” y que se trabajaba con la FIFA en la creación de estatutos y asociaciones independientes para cada rama del fútbol chileno, desde el femenino hasta el amateur. Sin embargo, hasta ahora no se había dado un paso concreto.
La separación permitiría que la ANFP se concentre exclusivamente en las competencias profesionales como la Primera División, Primera B y Segunda División, mientras que la Federación asumiría la conducción del desarrollo del fútbol en todas sus formas: juvenil, femenino, selecciones nacionales, fútbol playa y futsal, entre otros. Con este nuevo impulso, Milad busca finalmente materializar una reestructuración largamente postergada en el balompié nacional.
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